jueves, 8 de septiembre de 2016

Un paseo por la Mancha del Quijote en el 400 aniversario de Cervantes


Con un presupuesto más que ajustado nuestras vacaciones este año nos han dado para pasear por territorio de la meseta castellana y poco más. Así que aprovechando el  400 aniversario de la muerte de Cervantes nos hemos ido a hacer la Ruta del Quijote por tierras de la Mancha. Así que entre Ciudad Real, y Toledo nos quedamos tras la pista del famoso hidalgo. 

Elegimos una encantadora y moderna casa rural, se llama Santa Ana y esta en Miguel Esteban (Toledo), al lado de El Toboso. 





Es uno de esos espacios para dejar pasar el tiempo en un completo relax,  Joaquin, su propietario, una maravilla de anfitrión. Es director de teatro y tiene la casa llena de muebles y atrezzos de obras. Un atractivo más para una casa muy especial. 

Con un patio central cubierto dentro de la casa lleno de libros y un patio exterior con una piscina-alberca perfecta para refrescarte del calor manchego. 



Empezamos por Tembleque, una villa donde ver la plaza mayor, que se utilizaba como plaza de toros. Y de Tembleque a Consuegra. Recomendable ver el atardecer desde el Castillo, con los molinos alrededor en plan ejército de gigantes.  
También están los de Campo de Criptana, y también dicen que ofrecen una de las puestas de sol más bonitas de España. Son del siglo XVI , diez conservan su estructura y maquinaria originales, pero sólo funcionan tres.

Seguimos carretera y manta, y llegamos a El Toboso, patria del amor del Quijote, Dulcinea. Dulcinea corresponde a Dulce Ana y hoy se puede visitar la casa de Doña Ana Martinez Zarco, el amor no correspondido de Cervantes. 


Es la casa típica de hidalgos y ricos labradores. Todos los muebles muy bien conservados y una empleada o funcionaria en la taquilla con la que puedes hablar de Cervantes y del Quijote como si estuvieras con literatos en el Café Gijón.


En El Toboso también es muy bonita la plaza y el museo Cervantino dónde descubrir centenares de ediciones del Quijote, en kurdo o en sardo, en japonés o en dialectos africanos. Y con dedicatorias históricas. 

Se nos hicieron muy cortas y no pudimos ver las lagunas de Villafranca de los Caballeros,la que llaman la playa de la Mancha, ni Argamasilla de Alba. 



Si que pudimos ver, al menos por la noche, Alcazar de San Juan, pero merece una visita mínimo de un día... Así que dejamos pendiente volver.

jueves, 23 de junio de 2016

Dénia, #creativecity por la Unesco



Aquí os dejo el segundo video que hemos realizado par el patronato de Turismo de la Costa Blanca. Un paseo por la ciudad que la Unesco ha elegido como Ciudad Creativa de la Gastronomía, que no es otra que la ciudad alicantina de Dénia.

lunes, 25 de abril de 2016

Caminando por la sierra de Crevillente: La ruta de Jaume El Barbut



La Sierra de Crevillente es un buen lugar para esconderse. Lo es ahora y lo era hace doscientos años, cuando por aquí tenia sus "negocios" Jaime el Barbudo, un bandolero que tuvo que echarse al monte después de un asunto de sangre, y que encontró seguro escondite en estas montañas. Su fama se puede rastrear en numerosos topónimos de Alicante y Murcia, e incluso pueden visitarse las cuevas en las que se escondía, como la Cueva de Jaume el Barbut al Fondó del Frares. Una ruta de senderismo circular de unos 15 kilómetros, de dificultad media, señalizada ( por decir algo) como sendero PR-CV 255.  

La ruta va bordeando la ladera septentrional de la sierra de Crevillente y tiene su punto de inicio en el Fondó del Frares. El camino transcurre por senderos franqueados de abundante vegetación. Si subimos hacia la cima de El Picatxo nos encontramos con una buena pinada y caminaremos siempre bajo una buena sombra, y en la parte que lleva al Corral del sastre, y a la cueva, nos encontraremos una increíble extensión de esparto, jalonado por bancales de viñas y almendros. 


Pero volvamos al personaje que da nombre a la ruta. Nacido en Crevillente (Alicante) en 1783, Jaime Alfonso el Barbudo se dedicaba a la ganadería por las montañas de la zona con lo cual no había rincón en toda la sierra que el bandolero no conociera. Pero a los 25 años se fue a trabajar a un viñedo de Catral donde era famoso "El zurdo”, un bandolero sin prejuicios, al que seguía una gran banda. Una de aquellas tardes “El Zurdo” intentó robar uvas en la finca donde Jaime trabajaba, y Jaime se defendió con un trabucazo que le propinó en el pecho. Aquí empezó la vida de Jaime como bandolero.

Dice la leyenda que cada rico que pasaba por su territorio debía pagar su impuesto, y que sólo robaba a los ricos y parte del botín lo repartía entre las gentes más humildes de los pueblos de la sierra. Parece que llegó a tener una banda de hasta 200 seguidores.


Y como no puede ser de otra forma Jaume El Barbut tuvo un final de bandolero: murió ahorcado el 15 de julio de 1824 y descuartizado en cinco trozos, que se exhibieron para escarmiento público, una vez fritos, en Crevillente, Hellín, Sax, Fortuna, Jumilla y Abanilla. 

lunes, 22 de febrero de 2016

Caminant per Benidorm: la ruta de la Torre de les Caletes

Si us acosteu per Benidorm i voleu fer un tomb per la seua història, sense deixar de veure el seu present, la vostra ruta és la de la Torre de les Caletes. Impressionants vistes de la ciutat dels gratacels des d'un dels indrets més desconeguts per al visitant.

La ruta de les Caletes la fem guiats per Francesc Llorca Ibi, filòleg de Benidorm i un apassionat del llenguatge mariner i la toponímia del seu poble. Gràcies als seus coneixements hem gaudit d'una ruta de dos hores de fàcil caminar, sobre camí asfaltat en la seua majoria. Fins i tot apta per a xiquets.

La ruta comença a la costera que hi ha abans de l'Hotel Nadal, al Racó de l'Oix i va paral·lela a la costa per camí senyalitzat.




Passarem per la cala del Ti Ximo i arribarem a la torre de les Caletes que dóna nom a la ruta. Les torres de guaita són torres de defensa que al llarg de tota la costa vigilaven l'atac dels pirates i corsaris. La de les Caletes, al nord es comunicava amb la torre Bombarda que vigilava la badia d'Altea, i pel sud amb la torre Aquiló. Aquest servici de vigilància estava dotat amb soldats o atalladors que donaven l'alarma amb senyals de foc o tocaven a rebat quan apareixien els pirates.

Aquesta torre era tan important per salvaguardar la població dels atacs que els musulmans volien tombar-la, i hi ha estat punt de molts atacs al llarg de la història. En un parell d'atacs pirates per part de pobladors de Tunísia, Benidorm va arribar a despoblar-se, va ser durant uns anys de l'edat mitjana.

Com hem dit, eixim des del Racó de l'Oix. I ací trobem la primera sorpresa per molts. El significat d'aquest topònim. Oix en valencià significa "ganes de vomitar", nàusees i d'ací aquest nom, ja que en aquesta zona antigament es formaven aiguamolls d'aigua estancada que feien molta pudor.



Després el primer punt de parada obligatòria el trobem a la Punta Llisera, on es calava una almadrava fins als anys 60. Aquest punt també va ser conegut com a Punta del Pinet, i era un redós per al temporal de Llevant. D'ací ve eixa frase feta popular que diu "fas més mal que un temporal de Llevant".

Més endavant i guaitant pels penya-segats podem veure la Cova de l'Aigua, la Cova del Presili
i la Cova del Moncàixer,  una atalaia permanent on podíen amagar-se dos galeres. Podeu imaginar! Quin temps de pirates! Bé, en realitat, ara també tenim de pirates, però d'una altra classe.

Espere que us agrade el post. I si voleu saber més de torres de defensa en la costa mediterrània, dels nostres pirates i corsaris, us recomane el llibre del meu amic Manel Biosca. Torres en la costa! Editat pel MARQ d'Alacant.


PD: Gràcies a Compromís-Benidorm per organitzar tan interessant ruta.

lunes, 8 de febrero de 2016

Una visita a Valencia: no te pierdas la restaurada "Capilla Sixtina valenciana"

Si tenéis pensado ir por Valencia proximamente , no dejar de pasar por la iglesia de San Nicolás. Después de 4 años de trabajos, luce impresionante. 


Es imposible no quedarse con la boca abierta tras entrar al templo y subir la vista hacia los frescos. Se despliegan sobre 2.000 metros cuadrados de bóvedas, nervios y columnas. Son las pinturas de Dionís Vidal  que pintó en los últimos años del siglo XVII que vuelven a tomar color

Desde su restauración a San Nicolás se le llama la “Capilla Sixtina valenciana”. No se trata de compararla con la obra de Miguel Ángel, pero si que es verdad que lucen increíbles los colores recuperados en los 1.904 metros cuadrados de superficie muy irregular, frente a los 800 metros cuadrados del cielo de la capilla más famosa de la Basílica del Vaticano.

El coste de la rehabilitación ha ascendido a 4,7 millones de euros y ha sido sufragado íntegramente por la fundación privada de Hortensia Herrero, esposa de Juan Roig, presidente de Mercadona.

Es tradición ir a esta iglesia todos los lunes para pedir algo de fortuna, al santo protector de los niños y de las necesidades económicas de la familia. De hecho las pinturas narran la vida y milagros de san Nicolás, del que se cuenta que sacó de la miseria a un padre y de la prostitución a sus tres hijas, entregándole dádivas anónimamente, lo que dio origen al mito de Santa Claus.